Clavos para hormigón: Clavos de albañilería de acero con alto contenido en carbono para fijaciones pesadas

Los clavos para hormigón, también conocidos como clavos para mampostería, están diseñados para fijar objetos en materiales duros y quebradizos como el hormigón y la mampostería. Estos clavos están fabricados con acero de alto contenido en carbono, lo que los hace mucho más duros que los clavos de hierro estándar. Esta mayor dureza, combinada con sus vástagos cortos y gruesos, garantiza una excelente resistencia a la perforación y fijación, lo que los hace ideales para aplicaciones pesadas en la construcción y otros entornos robustos.

Especificaciones:

• Material: Acero con alto contenido en carbono (1045 o C1022).
• Dureza: Mayor que HRC 50° para una durabilidad superior.
• Tipos de cabeza: Opciones redondas, ovaladas y sin cabeza disponibles.
• Diámetro de la cabeza: Rangos de 0,051″ a 0,472″ para adaptarse a diferentes aplicaciones.
• Tipos de mango: Acanalado liso, recto y estriado, que ofrece versatilidad en función de la dureza del sustrato.
• Diámetro del vástago: Disponible en calibres de 5 a 20.
• Longitud de la uña: De 0,5″ a 10″, adecuado para una amplia variedad de tareas.
• Opciones de puntos: Puntas romas o de diamante para mejorar la conducción y el agarre en diferentes materiales.
• Tratamientos superficiales: Disponibles en acabados galvanizado por inmersión en caliente, pulido, electrogalvanizado o cincado para ofrecer resistencia a la corrosión y una mayor durabilidad.

Características:

• Excepcionales propiedades antiflexión y antigrietas: Los clavos galvanizados para hormigón se someten a un tratamiento térmico avanzado que los hace muy resistentes a la flexión, el agrietamiento y otras formas de deformación durante su uso.
• Poder de sujeción superior: El diseño estriado del vástago proporciona la máxima fuerza de sujeción, garantizando una fijación segura incluso en las condiciones más exigentes.
• Alta resistencia a la retirada: Estos clavos están diseñados para resistir el arrancamiento, proporcionando una conexión firme y estable al sustrato.
• Tipos de mango y cabeza versátiles: Los distintos diseños de mango (liso, estriado) y formas de cabeza (redonda, ovalada, sin cabeza) ofrecen soluciones para diferentes materiales y aplicaciones.

Aplicaciones:

• Fijación de materiales a la mampostería: Ideal para fijar madera y otros materiales a hormigón, ladrillos y otras superficies duras.
• Construcción y armazón: Se utiliza habitualmente en proyectos de construcción residencial y comercial en los que es esencial una fijación duradera y firme.
• Sujeción resistente: La construcción de acero con alto contenido en carbono garantiza que estos clavos puedan penetrar en materiales duros sin doblarse ni romperse, lo que los hace adecuados para trabajos de fijación robustos.
• Usos especializados: Disponibles en varios acabados y estilos, como clavos con vástago de tornillo o con tapa en T, se pueden personalizar según los requisitos específicos de cada proyecto.